Fotografía de... ¿maquetas?
by
, 28/04/11 at 09:00:00 (8164 Visitas)
Puede que hayáis visto desde hace un tiempo fotografías, sobre todo de paisajes, que parecen ser maquetas, con una profundidad de campo un tanto especial, como hechas de algo pequeño, y desde muy cerca, ya que la zona enfocada es poca y muy bien delimitada. Además tienen unos colores muy vivos.
Si os gustaría poder hacer algo así, pero no sabríais por donde empezar, tengo una buena noticia, porque es facilísimo, y voy a explicar el proceso a continuación.
Lo primero es encontrar una foto adecuada, ya que no sirve cualquiera. Los paisajes (naturales o urbanos), suelen servir, y sobre todo los hechos desde un punto alto.
Abrimos la fotografía en Photoshop, y entramos en Máscara rápida apretando a la letra Q (veréis que varía el nombre del archivo en la ventana de Photoshop, se añade "máscara rápida")
A continuación, con la herramienta Degradado configurada de manera parecida a la de la imagen siguiente, y eligiendo el estilo degradado reflejado, que es el que va del centro hacia los dos lados, vamos a aplicarlo sobre la zona que queremos que quede enfocada: desde el centro hasta uno de los lados.
Si no acertáis a la primera con la zona exacta que queréis, no os preocupéis por volver a definirla hasta que el resultado sea el que buscamos.
Una vez definida así la zona que no vamos a desenfocar, salimos de máscara rápida apretando de nuevo la Q. Comprobamos que la zona seleccionada sea la que queremos que quede desenfocada. De no serlo, podemos invertir la selección en el menú de arriba, o usar Ctrl+Mayus+I.
Ahora aplicaremos un filtro de desenfoque de lente sobre la zona seleccionada. Es recomendable duplicar la capa Fondo antes de aplicar este efecto, para conservar siempre la imagen original en caso de que cambiemos de opinión.
El parámetro más importante a la hora de aplicar el filtro de desenfoque es el de Radio, que es el que realmente va a definir si desenfocamos mucho o poco. La cantidad vendrá a gustos, aunque es evidente que tiene que notarse bastante diferencia.
Si queréis podéis modificar otros parámetros, como brillo o forma del Iris, aunque esto es prácticamente inapreciable a simple vista.
Ya sólo nos falta modificar el color. Será tan simple como subir la saturación general de la foto. Con cuidado de no estropear el aspecto de la foto, subimos hasta que nos parezca adecuado. Empezará a parecer irreal pero, ¿no era eso lo que buscábamos?
Por último, aumentamos el contraste con, por ejemplo, la herramienta Curvas. Subimos claros y bajamos oscuros, en la medida que corresponda, dependiendo de la foto. Cuidado con este ajuste porque también sube la saturación de la imagen. Quizá tengáis que ajustar el paso anterior tras contrastar con curvas, hasta encontrar el equilibrio.
Si os interesa, podéis añadir una última máscara de enfoque sobre la imagen resultante para resaltar aún más el contraste entre la zona enfocada y la desenfocada, aunque no es imprescindible.
¡Y listo! Ya sólo os queda probarlo y enseñar vuestros resultados
Algunos ejemplos más.
Fotos: wambando