La foto tiene mucha fuerza desde el punto de vista "humano". Una persona en una silla de ruedas contempla el mar y no podemos evitar la evocación a lo que no puede hacer, lo que pudo ser o fue y lo que probablemente nunca será. Los "bloques" del lado izquierdo podrían "molestar" a más de uno, ya que seccionan el mar que es el elemento clarificador, pero al mísmo tiempo su irregularidad manifiesta también puede representar el difícil o imposible camino que, en innumerables ocasiones, se antepone en su vida. Personalmente me gusta, soy de los que piensa que es mejor ese "toque imperfecto" antes de la "simetría geométrica imperante...".
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