¡Buen viaje!
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, 01/08/11 at 14:17:57 (37174 Visitas)
Ahora que muchos de vosotros os vais de vacaciones, vamos a ver algunas claves para que las fotos de viajes sean más personales y atractivas.
Aunque algunas veces no se puede evitar hacer una foto típica, no es bueno dejarnos llevar demasiado por esta tendencia, porque al final acabaremos con una colección de "postales", igual que la que podría hacer cualquier otro turista, y al final esto no resulta un buen reportaje de viaje.
Vamos a ver una serie de consejos para obtener fotos diferentes y más interesantes.
Lo primero es que hay que probar nuevas rutas, porque aunque la turística puede estar bien, debemos tratar de encontrar alguna ruta alternativa que nos sorprenda.
Además, nunca debemos olvidar mezclarnos con los habitantes de la ciudad en su vida cotidiana: visitar los barrios antiguos, los mercados, etc., intentando captar escenas espontáneas.
También tenemos que esforzarnos en buscar una composición atrevida u original, y no se trata de hacer composiciones muy arriesgadas, sino de buscar el ángulo, o la manera de captar una imagen que resulte más original o novedosa. Esto lo podremos conseguir teniendo un poco de paciencia para estudiar la zona, y estando muy atento para descubrir todas las posibilidades. Veis a continuación la fotografía que cualquiera haría, y dos ejemplos de lo que se puede hacer sin caer en la foto más fácil y directa.
Captura de pantalla de una búsqueda de "Sagrada Familia" en Google Imágenes. Seguramente no queramos hacer una igual.
Fotografía de Yurian Quintana
Fotografía de Yurian Quintana
Tendemos mucho a fotografiar paisajes básicamente, y no es que esté mal hacer fotos de paisajes, pero cuando sólo tenemos eso puede acabar siendo un poco aburrido el conjunto de fotos del viaje, de manera que será conveniente hacer también fotografías de detalles que nos resulten curiosos o particulares de esa zona.
Siempre es buena idea fotografiar a gente del lugar, además de nuestros propios compañeros de viaje, para tener una buena muestra del estilo de vida, moda, cultura... Recomiendo dejar la vergüenza a un lado, pedir permiso y hacerse con unos cuantos retratos.
No estarán de más algunas fotografía improvisadas, de escenas callejeras fortuitas, para lo que debemos llevar la cámara siempre a punto.
Un último truco para tener fotografías variadas, es proponerse algunos temas o categorías antes de empezar el viaje. Esto dependerá de los gustos o intereses personales de cada uno, y podrían ser, por ejemplo: arquitectura, características geográficas, gente, vestimenta…
Ya sólo queda cargar baterías, preparar la maleta, y ¡a disparar!