¡Gran error! No el 24-105 es un L. Todos los L son montura EF y no sólo valen para formato completo, es que están a la altura de esos sensores. Sólo tendría sentido desprenderse del 24-105 para adquirir objetivos fijos o en su defecto el 24-70 f2.8L (no por mejor, que no lo es, si no por ese diafragma más).
Sobre el dilema 50D ó 5D, es muy fácil: la 5D.
Si estás muy, pero que muy contento con la 50D, pues no te metas en berenjenales y sigue con lo que tienes. Sin embargo, si necesitas algo más, por ejemplo un punto más de calidad en los resultados finales de tus fotos, un paso más de ISO con buen control de ruido o un visor de verdad (este fue mi caso), entonces no hay duda, la 5D. En cuanto a velocidad y eficacia de enfoque van a la par.
Sobre la duda del estado de la máquina, es cosa de encontrar un vendedor de confianza. De todos modos, lo que falla con el tiempo es el obturador, y te aseguro que vale la pena gastarse el dinero para cambiarlo por uno nuevo. Pero para eso hay que hacer muchas fotos, 100.000, que ya son fotos (ponte a contar y cuando llegues a ese número para, je, je, verás como es un número muy gordo).
Con la 5D sólo hay que tener un poco de precaución con el polvo en el sensor, que al ser grande se cuela algo más. Por cierto, la solución para ese tema del polvo es el objetivo que ya tienes, el 24-105L. Pegadito a la cámara proporciona un sinfín de satisfacciones. Está muy a la altura. Un gran matrimonio, la 5D y el 24-105L.
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