He disfrutado durante unas semanas del zoom EF 24–105/4L IS II USM, la nueva versión del popular zoom todoterreno de Canon. Nunca he sido un fan de la primera versión, porque considero que ofrece una calidad óptica dispar (un poco lotería, según el modelo que te toque) y por un viñeteo –en mi opinión– excesivo.

La versión II ofrece la misma calidad de materiales de construcción (sigo pensando que Canon debería utilizar metal en sus objetivos de la Serie L, pero es una preferencia personal). Pese a su construcción en plástico, la sensación en las manos me ha parecido mejor y más resistente y duradera que la primera versión IS. Selloso de goma impiden la entrada de polvo, humedad y lluvia ligera o salpicaduras en el interior del objetivo.


A diferencia de otros zooms Canon, al variar las distancias focales la longitud del objetivo se alarga, algo que no a todos nos gusta. Las dimensiones son más largas que las de su predecesor e incorpora un conmutador "LOCK", que bloquea el aro de selección de focales a 24mm e impide el desplazamiento por gravedad de la longitud del objetivo.



El sistema de estabilización me ha parecido mejor que el disponible en la versión IS original; no es difícil conseguir imágenes libres de trepidación con velocidades de hasta 1/4seg. (sin tener las manos más firmes del mundo). La incorporación de un sistema de estabilización fiable facilita disparar con ISO más bajos en condiciones adversas de luz o jugar con el movimiento en fondos fijos.



Por su focal, es una óptica muy versátil, siendo un objetivo muy adecuado para la fotografía de viajes y la street photo. Disponer de un angular medio a un teleobjetivo corto facilita capturar desde un paisaje o la majestuosidad de un edificio a realizar un retrato o fotografiar un detalle.



La respuesta del sistema AF me ha parecido la típica de los objetivos USM: rápida y silenciosa. En ninguna ocasión me he encontrado con el desagradable efecto rebote de enfoque (cuando la cámara pierde una referencia para enfocar), aunque supongo que hacer las pruebas con la nueva EOS 5D Mark IV también ayuda a la hora de lograr la máxima satisfacción en el enfoque de una óptica. Incluso con poca luz y con un motivo plano es posible conseguir rápidamente un foco perfecto.



La calidad óptica me ha dejado un sabor de boca mucho más agradable que la versión anterior, que dependiendo de la unidad que tuviera para hacer las pruebas ofrecía una calidad óptica radicalmente distinta. El nuevo diseño óptico del 24–105/4L IS II USM ha crecido en detalle, contraste y ha sabido corregir aquellos aspectos mejorables de la primera versión, como las aberraciones cromáticas o el viñeteo excesivo. Con la nueva versión podemos descubrir que también a ƒ/4 podemos conseguir imágenes ricas en contraste y detalle, gracias a una resolución lineal más elevada, capaz de satisfacer las necesidades de los sensores de los últimos modelos de la gama 5D: 5DS, 5DS R y 5D Mark IV.



Os dejo el enlace a las pruebas completas y mi valoración personal de la nueva versión del todoterreno de Canon.

¡Salu2 y felices fiestas!