Hagamos las cosas bien, seguras, y sin poner a nadie en peligro, po favó.

[Neuromante]

Soy un puto novato en esto. No me gano la vida con esto, y por ahora no tengo ningún plan para sacar de la fotografía más que agradables caminatas por donde sea, caras extrañadas de viandantes, e interminables horas en el PC con el Raw Therapee intentando hacer que lo que he hecho merezca la pena echarle un ojo. Porque ni ligar, oigan.

Me gusta hacer foto urbana, más que por un estudio previo de las distintas corrientes y estilos fotográficos, porque me gusta pasear por la ciudad sin rumbo fijo, descubrir cosas nuevas y perderme en callejones y callejuelas por las que jamás nunca había pasado. Es divertido, y si encima me llevo algo luego para enseñarlo y que alguien lo vea, pues tremendo.

Evidentemente, si vas haciendo fotos por la calle, hay cosas con las que hay que tener cuidado. No sólo hay que ser consciente de tu entorno (No, ir a hacer fotos al mercadillo de cromos de la Plaza de Quintana, por muy entrañable que sea, seguramente que te va a dar más problemas con los padres diciendo "que cojones hace el tipo ese con un teleobjetivo" que momentos entrañables), entender que aunque la mayor parte de las veces eres como un fantasma entre la gente que va del punto A al punto B en el camino de su vida, hay muchas otras en las que puedes molestar o resultar incómodo, y, sobre todo, tener cuidado con donde te pones, porque por muy chula que te pueda quedar una foto, mola mucho más que no te pase un coche por encima.

Hoy he salido a dar una vuelta por Madrid, buscando fotos de gente yendo de sus particulares puntos A a los particulares puntos B. Vamos a decir que estaba por la zona centro, en una de las principales arterias de Madrid, cruzándola. Al otro lado, algo lejos, la arteria en cuestión se había quedado completamente vacía, ya que estaba entre dos semáforos que habían bloqueado el recorrido. De repente, una figura sale corriendo de una de las aceras con algo en la mano, se planta en mitad de la carretera, se arrodilla, hace algo, y se vuelve. Una pareja detrás de mi comenta "hay que ser gilipollas para atarse los zapatos en mitad de la calle." Supongo que con las cosas de llevar unos años con esto, hay comportamientos que "huelen" y evidentemente el tipo en cuestión no estaba atándose los zapatos, sino buscando un encuadre fetén.

Ahora, quizá estoy exagerando, quizá no fue para tanto, ya que estaba en mitad de la calle (Aunque no en un paso de cebra), pero no había ningún coche cerca por los semáforos, pero es que no puedo sacarme de la cabeza que el concepto de ponerse en el centro de una calle enorme de una ciudad, aunque no pasen coches, para poder sacar una foto chula, es una irresponsabilidad del tamaño de la lente Sigma esa de 5000 pavos que se hizo famosa por las reviews de coña de Amazon. Y sobre todo que es el tipo de situación en el que el riesgo (Tanto para ti como fotógrafo como para el resto de la gente que pasaba por ahí) deja en pañales a cualquier foto que te pueda salir, sobre todo si hablamos de monumentos que han sido fotografiados ad nauseam.

[Flestegas]

Habría que saber que es lo que hacia, en todo caso principalmente era su integridad física la que corría peligro. Piensa en lo que hace un reportero de los muchos que hay cubriendo zonas en conflicto permanente o documentando arriesgadas expediciones y lo vemos como unos profesionales desempeñando su trabajo.
Desde luego ponerse en peligro por una foto que para lo único que va a servir es para enseñar a los amigos del facebok si que es tontería.
Saludos

[enricvision]

Hombre, que ponerse en medio de una calle de ciudad (que no en autopista), tampoco es para tanto. Algunas veces lo he hecho, y alguna hasta con trípode. Y oye, es muy divertido. La perspectiva es excelente y la adrenalina corre que se las pela. Te crece un ojo en la nuca!!, jajaja
Prueba centrado y detrás de un Paso Cebra, toma medio-baja y verás que foto más xula sale

Salu2 de otro aficionadillo

(realmente, cada vez estoy menos para esos trotes loculeos, pero si hay una buena toma....)

[DesEOSo]

A mí también me parece una chorrada el discurso. No hay nada mejor que un fotógrafo intrépido.

[Salvo]

Pues yo tampoco le veo mayor problema.
Si no había coches en movimiento porque los semáforos estaban en rojo y fue algo rápido como has contado, no veo que se haya puesto en peligro. Seguramente hasta llevaba un rato observando los semáforos para saber cuando poder hacer la foto.

[josep violant]

Con esto del riesgo cero parece que se pierde espontaneidad. Hemos dejado que gestionen nuestro propio sentido común. Ahora nuestros niños a jugar todos en zonas acotadas en mini parquecitos de risa, en bicicleta por el carril bici, y no te salgas! etc etc Para el solsticio de verano ni una triste hoguera. Está todo prohibido o a punto de estarlo. Hombre si dijeras que estaba la carretera a tope... pero vacía? Tu vida te pertenece.

[XATRAC]

Haaayyyy, los urbanitas. Todo debe estar en su lugar, todo ordenado, amantes de las normas (que exigen cumplir a los demás), lo socialmente correto, adoctrinados para que no se desmadren. !!! Coño, hay algo más en este mundo !!! Todo el mundo admira a los artistas por su arte (o lo pretenden) pero no por lo que hacen a nivel personal. ¿Se puede separar el arte del pensamiento y la acción? ¿Cuanta gente admira a Goya, Dalí, Picaso, Tápies, Sorolla...... y sería incapaz de de llevar su vida?

No quisiera extenderme en este tema, pero creo que merece una reflexión a fondo.

Un saludo.

[noldor]

Bueno, mentiría si no admitiese que en alguna ocasión puntual he hecho algo semejante... Bien es cierto que en condiciones muy controladas y con toda la prudencia del mundo.
Pero antes que echar piedras al tejado del gremio, me viene a la memoria una secuencia vista en un telediario de máxima audiencia no hace mucho, coincidiendo con el enésimo temporar de viento y aguaceros, y con aviso naranja por fuerte oleaje... Si, el de esa turista intentando hacerse un selfie (con su smartphone) en un rompeolas mientras se abatía sobre el ola tras ola... Una y otra vez intentando capturar el momento exacto en que la ola estallaba sobre su despoblado craneo, y una vez tras otra que era derribada y casi arrastrada por la fuerza de la naturaleza... Poniéndose en peligro una y otra vez ella misma, y comprometiendo la vida de quienes se verían en la obligación de auxiliarla en el mas que probable caso de verse arrastrada al mar finalmente... Y todo para conseguir una cochina foto de un rostro remojado, desencajado por el esfuerzo, desenfocado (casi seguro), mal encuadrado y peor expuesto y un fondo movido por el pésimo pulso del momento...
A ver si estamos poniendo el foco en el cementerio equivocado...

[Nividhia]

Yo siempre les digo a mis alumnos que cuando haya una catástrofe distingues fácilmente al fotógrafo porque es el que corre hacia ella en lugar de escapar. Vale que hay que tener cabeza, pero hombre, tampoco vayamos con armadura por la calle.