Cosillas del capitalismo. Supongo que cuando te das una vuelta por ciertos almacenes
con reminiscencias anglosajonas, les harás notar a sus educados dependientes que venden material fotográfico a un precio desorbitado con respecto a multitud de páginas chinas. Y
seguro que lo hacen a sabiendas,
lo cual se puede considerar casi como obrar de mala fe... O no...
Las cosas son mas sencillas: cada uno sabe lo que tiene (o eso presupongo), y sabe al precio que lo quiere vender. Entonces acudimos a un lugar que nos facilite realizar una transacción, digamos un mercado, donde multitud de
agentes vendedores exponen al escrutinio público de otra multitud de agentes compradores su mercancía, y sus condiciones. A su vez, los distintos agentes compradores se ponen en contacto con los vendedores, exponiendo sus exigencias y sus
condiciones para que la venta se perfeccione. De ese conjunto de
fuerzas compradoras y vendedoras, de la igualdad o desigualdad de componentes de ambas en cada momento dado, del
ritmo que marcan las nuevas innovaciones tecnológicas que cambian la percepción de los productos,
de la época del año que sea, q
ue altera el estado de ánimo de ambos, y de múltiples factores que no vienen a cuento, se derivan unos precios de intercambio que suelen ser admitidos como razonables por ambas partes
en cada momento del tiempo. Esto siempre y cuando fluya la información por todos los
rincones del mercado. Y esta en una
imperfección típica de casi cualquier mercado que nos pongamos a analizar.
Pero aquí entra en juego la responsabilidad de cada agente que, en beneficio propio, debe estar al corriente de la mayor cantidad de datos posibles relativos a la transacción que desea realizar.
Como en cualquier otro ámbito de la vida, en una transacción no se trasladan todas y cada una de las variables que llevan a cada uno de los agentes a mantener una postura determinada, ni creo que sea labor de un tercero la de sancionar dichas posturas como correctas o incorrectas
en virtud de sus propias variables o información manejada.
Tanto vendedores como compradores deben respetar las reglas del juego (las normas del foro), y mostrar todas las cartas sobre la mesa (aportando toda la información veraz de que sean capaces, contestando a las dudas planteadas por la parte contraria, y obrando con total transparencia no solo de cara a conseguir un acuerdo satisfactorio para ambos, sino también
para que el conjunto del mercado siga sumando nueva información con la que elaborar futuros acuerdos)...
Dentro de esos parámetros y de la honradez mas amplia, creo que vale prácticamente todo...
El que quiera fiscalizar todo tipo de acuerdos con parámetros diferentes, atendiendo a un único factor (el precio de compra venta) es muy libre y no tiene mas que
abrir un hilo al respecto para registrar los precios medios alcanzados en cada producto, para que pueda ser tomados como guías en futuras operaciones. Pero le auguro una tarea de colosales proporciones...
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