Poner la cámara en posición vertical sin necesidad de girar la rótula del trípode a una posición antinatural, incómoda y, en cierta medida, inestable.
La parte corta de la L, que queda en el lateral de la cámara, lleva el mismo sistema de fijación que la parte larga ubicada en la base.
Sueltas la mordaza del trípode, giras la cámara, aprietas de nuevo la mordaza e voilá, posición vertical estable y el trípode sigue como estaba, nivelado.
Si te fijas en mi cámara está pillada al trípode por debajo, pero podría estarlo igualmente por el lateral.
Para mí es un must haciendo retrato, panorámicas, etc., y en general para cualquier cosa que requiera cambiar la cámara de horizontal a vertical sobre un trípode.
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