Actualmente y hablando de Canon, los formatos del sensor CMOS se dividen en APS-C (el más común), APS-H y el 35mm de la Mark EOS digital. Desde hace un tiempo a esta parte han proliferado los objetivos específicos para digitales que, a parte de tener algunas lentes tratadas para evitar las famosas aberraciones cromáticas, están diseñados para sensores de tamaño APS-C. Pero suponiendo un abaratamiento progresivo en la construcción de sensores CMOS es posible que dentro de un par de años nos empiecen a bombardear con camaras con sensor a tamaño 35mm y entonces nos tendremos que comer con patatas los flamantes objetivos diseñados en exclusiva para APS-C. Para mi y me imagino que para cualquiera que lea estas líneas, es más importante una buena óptica que un cuerpo y de momento la serie L de Canon no es específica para APS-C por lo que un 300mm L (unos 1200€) nos seguiría siendo válido para un futuro cambio de tamaño de sensor pero eso no ocurrirá si nos compramos un 17-75mm IS (unos 700€) y cambiamos de sensor pues lo tendríamos que tirar a la basura.
Conociendo como funciona la industria lo más
seguro es que ocurra el cambio a tamaño 35mm pues a las marcas les interesa que estemos comprando todo el día y en esto tenemos que tener cuidado pues la vida de un cuerpo digital* está en torno a los 4 ó 5 años pero la de un objetivo bien cuidado podría ser eterna.
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