Últimamente me estoy aficionando a las revistas de actualidad extranjeras. Casi todas me parecen mejor que los dominicales españoles. El fin de semana pasado quería comprar Le Vif -una revista belga-, pero en el quiosco de mi barrio se había agotado. Aprovechando que hoy estaba en el Parlamento Europeo, haciendo un encargo para la agencia Ical, he pasado por la librería a ver si tenían la revista. Para quien no lo sepa, aclaro que el Parlamento es un sitio inmenso, con ...