El Rincón del Experto

También conocida como la hora mágica, la hora azul es el periodo de tiempo que rodea al atardecer, empieza una media hora antes de que se ponga el sol y dura hasta media hora después. Aunque dependiendo de la época del año el tiempo puede variar, dura aproximadamente una hora, peridodo durante el cual los 20 minutos centrales son los óptimos para realizar nuestras fotografías.

Durante este tiempo el cielo va degradando de azul claro al azul oscuro casi negro de la noche, generando además otras tonalidades dependiendo del día, desde rojizos y rosados hasta amarillos o anaranjados.



¿Por qué fotografiar durante la hora azul?

Uno de los principales elementos a fotografiar que más luce en este periodo de tiempo es la arquitectura, pero no cualquiera, solo aquella que tenga iluminación monumental nocturna. Durante este periodo es cuando se genera el mayor contraste entre la iluminación artificial y el cielo, ofreciendo así un tipo de fotografías en las que las formas que dibuja la iluminación artificial se enfatizan y resaltan gracias a los tonos del cielo.

Así pues, si en nuestro planning de viaje o excursión fotográfica tenemos prevista una visita a un monumento arquitectónico de estas características, sería una opción programarla a última hora del día para poderle sacar el mayor provecho tanto con luz día como cuando llegue la hora azul.

En este punto es interesante informarse si el monumento se encenderá a la hora apropiada. Ya que especialmente en la semana de cambio de hora los ayuntamientos a menudo tardan en reprogramar el encendido de la iluminación artificial.



¿Cómo fotografiar durante la hora azul?

Algo imprescindible para fotografiar durante la hora azul será un trípode, o bien alguna superficie sólida donde apoyar nuestra cámara. Lo más recomendado es disparar con el programa manual, que será el que más cómodamente nos permitirá ajustar la exposición a medida que se vaya yendo la luz. Ya que gracias al trípode no tendremos límite de velocidad de obturación, conviene usar la ISO más baja posible para evitar la aparición de ruido. ¿Y dónde medimos? ¡Buena pregunta! Como la protagonista de la fotografía es la iluminación monumental, deberemos medir a la zona iluminada por la luz artificial, es decir, ni al cielo, ni a los puntos de luz directamente, sino donde la luz artificial baña la arquitectura.



Consideraciones

Hay un par de cosas a tener en cuenta si vamos a fotografiar la hora azul. La primera de todas es que no siempre se da la hora azul durante el atardecer. Un cielo encapotado o la niebla, nos ocultarán por completo las tonalidades del cielo, convirtiendo la hora azul... en la hora gris! xD

La segunda es el efecto producido por la difracción de la luz, conocido como efecto “estrellas”, que es cuando los puntos de luz se convierten en tales. Este efecto viene producido por la forma del agujero por donde pasa la luz, es decir, nuestro diafragma, por lo tanto, dependiendo de las aspas que tenga, tantas puntas tendrá la estrella que se forme. Es importante saber que este efecto solo se produce con los puntos de iluminación directa (farolas por ejemplo), y que cuanto más tiempo de exposición tengamos más se alargarán las puntas de la estrella

Por lo tanto si nos encontramos en una calle donde existen farolas de punta a punta, quizás no nos interese este efecto y decidamos abrir un poco más diafragma para evitar tanto tiempo de exposición y por lo tanto la formación de estas estrellas