RAW: no es ningun acrónimo; significa crudo en inglés y, por desgracia, no es ningun estándar; hay que diferenciar:

1) RAW de PhotoShop:
Es un archivo binario al que se le ha quitado toda la información no vital.
- No contiene esquema de compresión.
- Cada octeto (byte) indica exclusivamente un valor de luminosidad en un solo canal.
- No ofrece modo de color.
- No especifica la profundidad de bits por canal de color: la mayoría de las imágenes serán de 8 bits pero las científicas suelen usar 16 bits (en este caso es necesario saber si es una imagen PC o Mac).
- No especifica el tamaño de la imagen: las dimensiones de la imagen en pixeles deben especificarse.
- No se especifican el número de canales de color: si es RGB serán 3 y si es CMYK serán 4.

2) RAW de cámara digital:
Este formato tampoco es estándar o sea cada fabricante tiene un formato propio y exclusivo, sin embargo, aunque los formatos sean propietarios estos RAW tienen características comunes:
- No comprimen la imagen al archivarla.
- Contienen la totalidad de los datos de la imagen tal y como fue captada por el sensor digital de la cámara fotográfica.
- No incluyen ninguna información sobre las características de la exposición: ni corrección de blancos, ni contraste, ni ajustes realizados manuales del fotógrafo, ni ajustes automáticos de la cámara, nada de nada...

Los ficheros RAW contienen la totalidad de los datos de la imagen captada por la cámara y, por lo tanto, sus correspondientes ficheros son muy grandes. Si nuestra 350D realiza una fotografía de 8 megapixels, el fichero RAW ocupará 8 millones de octetos (bytes), uno por pixel. El formato RAW se usa cuando se quiere tomar una fotografía tal y como fue captada por el sensor digital (o en el caso de RAW de Photoshop para que se puedan abrir imágenes con formatos no documentados), sin ningún tipo de manipulación, para procesarla posteriormente en el ordenador mediante un programa de tratamiento de imágenes.